El magnate estadounidense, conocido por ser una persona bastante extravagante a la hora de inicar un startup, es el creador de una compañía que se dedica a hacer implantes cerebrales: Neuralink. En los últimos días, dicha empresa ha cobrado bastante relevancia dado que se confirmó el implante de un chip cerebral en un segundo paciente (ya había otra persona al cual se le había practicado el mismo procedimiento).

¿Para qué sirve este implante cerebral?

Según Musk, este chip está diseñado para dar a los pacientes paralizados la posibilidad de usar distintos dispositivos digitales con solo pensar. Es decir, gracias a este implante la persona no necesitaría el uso de interfaces como un teclado, mouse o sus manos (en el caso de un dispositivo táctil) para poder utilizar un artefacto tecnológico: todo lo podría hacer con su mente. Si, suena a ciencia ficción.

El primer paciente que recibió este chip estaba paralizado por una lesión en la médula espinal. Lo que se informó desde la empresa es que el dispositivo implantado le ha permitido jugar videojuegos, navegar por Internet, publicar en las redes sociales y mover un cursor en su computadora portátil.

El paciente cero

En el podcast número 438 de Lex Fridman, titulado “Neuralink y el futuro de la humanidad” (con una duración de más de 8 horas), Musk habló poco sobre el segundo paciente. Sólo confirmó que tenía una lesión en la médula espinal, parecida a la del primer paciente, y que quedó paralizado luego de un accidente de buceo.

«No quiero quemarlo (I don’t want to jinx it), pero parece haber salido todo muy bien con el segundo implante», dijo Musk al presentador del podcast. «Hay mucha señal, muchos electrodos. “Está funcionando muy bien”. Al parecer, 400 de los electrodos del implante en el cerebro del segundo paciente están funcionando y eso es una buena noticia para la compañía del empresario.

Otro de los invitados al podcast fue, nada más y nada menos, que el primer paciente: Noland Arbaugh, junto con tres ejecutivos de Neuralink, quienes dieron detalles sobre cómo funcionan el implante y la cirugía dirigida por robot.

Comentaron que, antes de que Arbaugh recibiera su implante en enero de este año, usaba una computadora empleando un palo en su boca para tocar la pantalla de una tablet. Arbaugh dijo que con el implante ahora simplemente puede pensar en lo que quiere que suceda en la pantalla de la computadora y el dispositivo lo hace posible, por lo que le ha dado un mínimo de independencia y ha reducido su dependencia de los cuidadores.

No todo es color de rosas dado que Arbaugh tuvo ciertas complicaciones luego de la cirugía. Varios cables del implante se retrajeron, lo que provocó que se reduzcan la cantidad de electrodos que podían medir las señales cerebrales del paciente. Para que quede claro, el cerebro emite señales (piénsenlo como un circuito eléctrico) y el chip implantado las capta para reproducirlas en un evento digital, como mover el puntero de un mouse. Respecto de esto, Neuralink ha dicho que restauró la capacidad del implante al realizar cambios que incluyeron la modificación de su algoritmo para que sea más sensible.

Todo está cruzado por la política…

Incluso, en el podcast, Musk se despacho con un pequeño elogio a Donald Trump, candidato a Presidente de los Estados Unidos por el Partido Republicano, ya que afirmó que hablo con él para realizar una comisión destinada a mejorar la «eficiencia del gobierno» a través de una menor regulación empresarial, en caso de que gane las elecciones. Para Musk, “las regulaciones estadounidenses obstaculizan la innovación”. Creo que este discurso me suena de algún lado, no necesito tomarme un avión para escucharlo

… Y cruzado por el dinero

Si bien me cuesta creer que un chip en el cerebro es algo que puede ser tan bueno, dado que todos sabemos que las empresas buscan un beneficio económico y muchas veces sin necesidad de hacer beneficencia (o tal vez haya visto demasiadas películas de ciencia ficción que me han convertido en un paranoico); lo cierto es que Musk “la ve” y hay algo en este tema de los implantes cerebrales para mejorar la vida de aquellas personas que han sufrido toda su vida detrás de un problema como los de médula espinal y que no pueden mover su cuerpo. Habrá que ver hasta dónde llega toda esta nueva, e incipiente, tecnología cerebral.

Por cierto, otra que la vio es Fantino… buen nombre, Alejandro, para tu medio.