La familia de Valentín Mercado denunció al Sanatorio Juan XXIII de General Roca por presunta mala praxis y acusó tanto a los profesionales médicos como al sanatorio de ocultar información sobre el estado de salud del pequeño. Según el informe de la autopsia, Valentín sufrió una hipoxia en el quirófano, una afección causada por la falta de oxígeno en el cerebro, que lo dejó en estado de muerte cerebral.

Desde el sitio web de noticias AN Roca se publicó que con el caso en manos de la justicia, ayer amigos y allegados a la familia de Valentín salieron nuevamente a las calles para exigir justicia. La movilización, que comenzó pasadas las 18:30 horas en la intersección de la Avenida Roca y Tucumán, se dirigió hacia el Sanatorio Juan XXIII, el lugar donde el niño ingresó con vida y salió con diagnóstico de muerte cerebral.

Durante la manifestación, se realizaron pedidos de justicia y se pegaron folletos con la imagen de Valentín. Ariana Toledo, la madre del pequeño, en diálogo con ANRoca, expresó: “Seguimos esperando respuestas”.

Además, mencionó que los testimonios recientes han sido favorables a la hipótesis que sostiene la familia: “Han hablado enfermeros, instrumentistas; entendemos que lo que pasó fue dentro del quirófano”.

En el ámbito judicial, el caso parece avanzar. Ariana comentó que la próxima semana se esperan nuevas entrevistas que podrían ser determinantes para la formulación de cargos: «Con eso ya estaríamos para formular cargos. Hasta el momento, no se han llevado a cabo audiencias formales; solo han tenido lugar entrevistas con los abogados y la fiscalía», afirmó.

Desde el Sanatorio Juan XXIII no se han comunicado con la familia y  los médicos responsables del quirófano mantienen el silencio. «Nunca los volví a ver», señaló.

Ayer la comunidad roquense volvió a exigir justicia, a la espera de que las investigaciones arrojen luz sobre lo sucedido en el quirófano y que la justicia defina el caso, se concluyó desde el portal de noticias roquense.