Villa Regina – En otros beneficios lo bueno de las lluvias de los últimos días fue que ayudó aplacar la tierra en suspensión debido a poco, y en algunos casos nulo, paso del regador por distintos puntos de la ciudad. Sin embargo, lo negativo de tanta agua fue que empeoró el estado de las calles que ya era difícil antes y que ahora se han tornado intransitables en varios sectores.

Una muestra de lo intransitable que están algunas arterias fue lo que ayer mencionó José, un vecino de barrio Nuevo que decidió hacer una imagen para dar cuenta cómo se encuentra el trayecto de ripio de avenida Cipolletti.

El otro punto negativo fue el que dieron a conocer algunos vecinos de barrio Matadero durante la mañana del jueves. “Así estamos en la 12 de Octubre desde ayer (por el miércoles). Se ha llamado a Obras Públicas para que venga a destapar la boca de tormenta y todavía no pasa nada2, comentó Laura. Al día siguiente se supo que fueron los propios vecinos quienes debieron hacer tareas para lograr el escurrimiento del agua.

Sin embargo, los reclamos de la ciudadanía no pasan solo por el estado de las calles. En este sentido, desde hace tiempo la ciudad está oscura y ello se agudizó con los recientes robos y actos vandálicos que afectó el servicio de alumbrado público.

El otro punto que también es tema de malestar permanente es el estado de abandono de las plazas. “Es increíble el abandono que tienen muchas plazas de Regina. Un claro ejemplo es la plaza ubicada en Charruas al 750, entre Martin Fierro y Domene. Nunca limpian o cortan el césped desde el Municipio, a pesar de que hemos llamado en innumerables cantidades de veces. Si más o menos se mantiene es por los vecinos. No cortan el césped, no la riegan y así con varios espacios públicos”, expresó semanas atrás una vecina del lugar y se reiteró durante los últimos días por parte de otros frentistas de la localidad.

La misma situación plantearon otros lectores al hacer mención al estado de abandono que presenta la Isla 58, por baños que permanecen cerrados y por la altura de los yuyos, los cuales en algunos sectores superan la altura de las mesas.

Sin dudas, el mayor reclamo y preocupación pasa por el foco de contaminación que significa de tener que soportar y convivir con los líquidos cloacales en la vía pública en los barrios Belgrano y Muner.

Vale señalar que esto último se produce debido a la rotura de dos redes troncales de cloacas, una de ellas en la calle Libertad y otra sobre la avenida Cipolletti. En el caso de barrio Belgrano, y puntualmente en la esquina de Libertad y Alberti, la pérdida cloacal se registra desde mediados de este año (ampliaremos en una próxima nota).

Desde la Redacción de LCR queremos indicar que pese a los reiterados intentos por obtener mayores precisiones y algunas respuestas a cada reclamo, desde el área de Obras Públicas nunca se ha accedido a mantener una entrevista con el medio.